martes, 19 de febrero de 2013

Capítulo 13: El día en que la Oscuridad venció a la Luz

Recomiendo escuchar esta canción mientras lees:

http://www.youtube.com/watch?v=jUfLwhGHU2o
 
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Mab: Hay que recuperarlo... ¡a cualquier precio!
Merlín: Mab... las arrugas...
Mab: Me voy... ¡pero recuperadlo y traédmelo!
Arturo: ¿Qué hacemos, Merlín?
-Cuando estemos todos lo pensaremos.
Merlín: No, tenemos que reaccionar rápido.
Soldado: Señor, se aproxima una nave no identificada.
Arturo: Será de los SeeD.

La nave aterrizó en medio del patio y de él salieron dos soldados muy bien vestidos a diferencia del que ahí estaba. Arturo se adelantó para recibirles.
 
SeeD: Buenas, rey Arturo.
Arturo: Hola.
SeeD: Edea quiere saber si necesitáis ayuda para la reconstrucción.
Arturo: Pues estaría bien.
SeeD: Señor Almasy... Edea quiere verte.
Seifer: Sí, sí, claro, claro. Un placer haberos conocido, chicos.
 
El joven SeeD, que parecía ser conocido como señro Almasy, subió a la nave sin despedirse más allá de esas palabras.
 
-Qué tío más raro.
-Pero le debo la vida...
SeeD: Señor, ¿hay algo más que deba saber Edea?
Arturo: Mmm... ¿por qué no baja ella misma?
SeeD: Señor, usted sabe muy bien que hay mucha gente que la quiere muerta, debe estar protegida y segura dentro del Jardín.
Arturo: Ya, ya, claro. Pues si quiere saber detalles que se deje de tanta seguridad y baje.
SeeD: Claro... en fin... en seguida mandaremos a nuestros técnicas y reparadores, con lo antigua que es esta arquitectura no tardaremos mucho en reconstruírlo.
Arturo: ¿Eso es un intento de ofenderme, mensajero?
 
Pero sin responder volvieron a entrar en la nave y desaparecieron.

Arturo: Que poca educación. En fin... ¿Entonces qué hacemos, Merlín?
Merlín: ...
Arturo: Merlín... ¿Merlín?
-¿Qué le pasa al mago?
-¿Mmm?

Todos miraron al anciano hechicero y vieron como estaba totalmente en trance, incluso tenía los ojos en blanco.
 
-¿Qué coño...?
Arturo: Genial, está pasando algo...
-¿Algo? ¿El qué?
 
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En el cielo de Camelot, Keiro y Bastet huían a toda velocidad con el grial, mientras ella lo tuviese en brazos sólo podría adquirir esa forma y no podrían tele transportarse.
 
-Bastet, adelántate, voy a asegurarme de que nadie nos sigue.
-Vale.
 
Bastet se adelantó a su máxima velocidad y Keiro se detuvo en su nube de Oscuridad observando al suelo. Entonces lo vio, un enormemente veloz rayo de Luz le pasó sin que siquiera pudiera reaccionar y se detuvo en frente de Bastet que a penas le dio tiempo a frenar, el rayo de Luz chocó a gran velocidad contra Bastet que salió volando hacia el suelo, por suerte Keiro la cogió en pleno vuelo deslizándose por el aire.
 
-¿Qué...?
 
La luz tomó forma y los dos pudieron ver a Eleone brillando en armonía y con los ojos totalmente azules.
 
-Ag... E-E-Eleone...
-No, no es ella...
-El grial me fue confiado para protegerlo por el mismísimo Reino de los Corazones hace siglos, devolvedlo o sufrid las consecuencias.
-¿No es Eleone?
-No, es Camelot. Estamos en problemas.
-¡¿Camelot?! ¿Cómo...?
-Es el Avatar de la Luz.
-...
-Tenéis diez segundos para soltar el grial e iros.
-Lo siento, pero eso no va a ocurrir. Bastet, ponte a cubierto y cuida el grial.
-¿Vas a enfrentarte a ella?
-No es Eleone, Bastet. Y te recuerdo que acabamos de derribar a Vali.
-...
 
Keiro soltó a Bastet que se alejó lentamente del que ahora era el escenario de batalla en pleno cielo y Keiro siguió en su nube de Oscuridad para no caer, Camelot invocó la Llave espada de Eleone.
 
-Puedo sentir profundamente los sentimientos que esta chica siente por vosotros, pero no me detendré.
-Genial, porque yo tampoco lo haré.
 
Los dos cogieron velocidad y chocaron con sus Llaves espada creando una enorme y poderosa onda expansiva que echó para atrás a Bastet. Más colisiones se siguieron y cada una de ellas volaba a Bastet un poco más.
 
-Qué poder... Keiro está a tope...
 
Los choques se veían por todo el cielo desde diferentes lugares, la velocidad con la que chocaban y el poder dejaban atónita a Bastet que no sabía qué hacer. No tardaron mucho los dos combatientes en detenerse pues no había vencedor de esa manera.
 
-He soñado tanto tiempo con poder probar mi fuerza contra la tuya.
-Extrañamente esta joven siente algo parecido.
-Eso es un orgullo para mí. Pero parece que no va a haber vencedor si seguimos así.
-Eso no es cierto.
-¿...?
-Puede que este cuerpo tenga sus limitaciones pero mi fuerza no las tiene.
-...y yo sí las tengo, ¿no? Pero... si sigues así mucho tiempo...
-Este cuerpo se desintegrará.
-¿Sacrificarás al único Avatar de la Luz que queda por una copa de oro?
-¿Sacrificarás tú este cuerpo por una copa de oro? Yo no tengo opción.
-Siempre hay opción.
-No cuando se trata de deber. Y mucho menos sabiendo lo que quieres hacer con el grial.
 
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-Tengo que hablar con vosotros, chicos.
-Ahora no, Vali. Los reencuentros pueden esperar.
-No es sobre eso, General. Es sobre Keiro y Bastet.
-¿...?
-Sé para qué quieren el grial.
-¿Lo sabes?
-¿Cómo?
-He... adquirido ciertas capacidades estos tres años. Como todos, supongo. Ahora soy capaz de escuchar a los Corazones.
-¿Cómo hace la reina?
-Sí, pero ella puede porque es un Avatar y yo porque he aprendido.
-¿Se puede aprender eso?
-Sí. Bueno, el caso es que Keiro planea invocar él mismo a los dioses oscuros.
-¡¿Cómo?!
-¿Lo dices en serio?
-¿Puede hacer eso?
-No lo sé. No puedo saber cuales son sus aptitudes, sólo sus deseos y anhelos.
-¿Y por qué iba a querer hacer eso?
-Porque él, al igual que Caos, cree que son nuestra única defensa contra el enemigo invisible.
-¿Y Keiro será capaz de mantener bajo su control a los dioses oscuros?
-Espera, ¿estás barajando la idea de dejarle que lo haga? Ni en broma. Estamos intentando detener a Caos por eso mismo, aunque Keiro sea o fuera nuestra amigo no podemos ni pensar en dejarle hacerlo.
-No, supongo que no...
-¿Qué diría Eleone de esto?
-Diría lo que acaba de decir mi hermano.
 
Alexander y Claudia aparecieron, todod se asustaron al ver tan ensangrentada a Claudia, en especial Abraham.
 
-Claudia, ¿estás bien?
-Sí, no os preocupéis.
-¿Sigue sin aparecer Eleone?
-Es posible que Merlín sepa donde está.
-Pues preguntárselo.
-Ahora no es posible me temo...
-...
 
Mientras seguían esperando todos le explicaban a Claudia y Alexander lo que había ocurrido bastante impactados por las noticias.
 
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-Está bien, hagámoslo a tu manera. ¡Bastet, dame el grial!
-¿Keiro?
-¡Vamos!

Bastet se acercó volando a Keiro.
 
-Pero no puedes cogerlo mientras...
-Sé lo que hago, Bastet. Dámelo.
 
Bastet le pasó el grial a Keiro y para su sorpresa pudo cogerlo sin problemas.
 
-¿Cómo...?
-Equilibrio, ¿recuerdas? El grial no puede ser tocado por Oscuridad, yo no soy ni Oscuridad ni Luz.
-¿...cuál es el trato?
-¿Trato?
-Los humanos siempre queréis un trato.
-Deja que nos vayamos sin el grial.
-Hecho.
-Bien... Chss (Ahora, Bastet, vamos a ser rápidos).
-Chss (¿Qué vas a hacer?)
-Chss (Lo siento por Eleone, pero necesito el grial).
-Chss (Keiro...)
 
Keiro le dio la mano a Bastet y algo ocurrió que Camelot no pudo divisar, luego se acercaron y le tendieron el grial.
 
-Todo tuyo, déjanos ir.
-Un trato es un trato. Pero no volváis nunca jamás.
 
Camelot cogió el grial y en un principio no pareció pasar nada, Keiro y Bastet fingieron que se iban pero no dejaron de mirar atrás esperando el momento. Entonces Eleone recuperó su conciencia a medias.
 
-¿Qué...?
-¡Oscuridad!
-¿Quién...? ¿Qué...? Ah...
 
Eleone pudo divisar su rostro en la copa y vio como su cara estaba perfectamente dividida, la mitad izquiera era normal, pero la derecha rebosaba de Oscuridad aunque su ojo intentaba resistirse manteniendo su azul normal.
 
-¿Qué... qué me ocurre?
-Keiro, ¿qué has hecho?
-Lo siento por ella, pero nos lo llevamos.
 
Keiro tiró del grial con fuerza y cogió a Bastet introduciéndola en un Portal de Oscuridad por el que huyeron. Eleone perdió del todo su poder como Camelot y cayó en picado hacia tierra.
 
-No... no... no puede ser... No puede haber Oscuridad en mí. ¿Qué me pasa? No...
 
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De vuelta al suelo, todos seguían pendientes de Merlín mientras pensaban sobre lo que estaba ocurriendo.
 
-¿Cuánto lleva así el viejo ya?
-Lo suficiente para preocuparnos.
-¿Rey Arturo?
Arturo: Nunca había estado tanto tiempo así. Debe estar viendo algo peligroso.
-¿Algo peligroso?
Arturo: Eso es lo que le pasa cuando usa su clarividencia, digamos que transporta sus sentidos a otra parte del Mundo y observa lo que está ocurriendo. Si no vuelve es porque es importante.
 
Ni siquiera les dio tiempo a reaccionar a ninguno cuando Merlín desapareció despegando del suelo a toda velocidad.
 
-¿Qué coño... ha sido eso?
Arturo: Hacía mucho que no veía a Merlín así.
-¿A dónde ha ido?
 
Merlín siguió volando a gran velocidad y cogió a Eleone en medio del aire antes de que siguiera cayendo y estrellándose, cuando bajó con Eleone en brazos todos se sorprendieron, mucho por ver que cogía a Eleone del cielo, pero aún más porque Merlín volvía a ser joven.
 
Arturo: ¿Qué? Merlín...
-¡Eleone! -¡Ele!
 
Alexander y Claudia se aproximaron y el primero cogió a la reina entre sus brazos para horrorizarse al verla en su forma.
 
-¿Qué le ha pasado?
-Alexander, ¿eres tú? No puedo ver, ¿qué me pasa?
-Sí, soy yo. ¿Qué le pasa?
 
Se notaba un extremo grado de tristeza en las palabras del general.
 
-¡¿Qué le pasa, Merlín?!
Merlín: El hechizo de Morgana... ese joven debió hacer algo...
-¿Ese joven? ¡¿Keiro?! ¡¿Keiro le hizo esto?! Voy a matarle... Eleone, tranquila, estoy aquí. Voy a cuidar de ti.
-No puedo ver, Alexander. No puedo ver.
-¿Qué le ocurre a mi hermana, Merlín? Por favor, díganoslo.
Merlín: Morgana introdujo a Eleone en un estado de trance, ella es especial, puede guarecer en su interior la consciencia de los Mundos.
-Eso es lo que pasó aquella vez...
-En Paraíso de los Hechiceros, ¿no?
-Le invadió el propio Mundo... Eleone...
-¿Y por qué está oscura? ¡¿Por qué?! No debería, ¿no? Es una princesa.
Merlín: Ahora mismo Eleone tiene dos consciencias, la suya y la de Camelot.
-¡...! ¿Dos? Pero eso...
Merlín: Es doloroso para un Avatar, el poder la ciega...
-¿Está sufriendo? Eleone...
-Alexander... tengo miedo...
Merlín: Ella no tiene Oscuridad en su Corazón pero Camelot sí...
Arturo: ¿Camelot ha caído en la Oscuridad?
Merlín: Sí, Arturo, me temo que sí.
Arturo: Entonces, si la reina libera Camelot.
-Se irá al garete...
Merlín: Por eso no lo libera. No lo hace conscientemente, pero sí de alguna manera... su madre la enseñó bien.
-Duele, Alexander, duele... haz algo, por favor...
 
Alexander empezó a llorar al ver a Eleone en ese estado.
 
-Eleone... estás siendo muy valiente... Snif... Buscaremos una solución te lo prometo.
 
Alexander se giró para mirar a todos, en especial a Merlín y Arturo.
 
Merlín: Si alguien sabe de Oscuridad es Edea...
-Snif... Le pediremos ayuda a Edea entonces...

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